En una emocionante velada de celebración, Juan Luís Guerra se alzó como la estrella de la noche al recibir cinco de importantes premios; el “mamborengue” La Llave de Mi Corazón, obtuvo los premios a Canción del Año y Mejor Canción Tropical del Año, mientras que la placa homónima, obtuvo el reconocimiento a Disco del Año, Mejor Álbum Merengue, Grabación del Año.
Es de anotar que el artista dominicano, que hace casi dos décadas comenzó a llevar la música de su nación por diferentes escenarios del mundo, de la mano del exitoso álbum Ojalá Que Llueva Café, fue también elegido como Personaje del Año por la Academia Latina de la Grabación, por la labor que realiza a través de la Fundación Juan Luís Guerra en ayuda de los menos favorecidos.
En la categoría de Mejor Álbum Cristiano en español, el ganador fue Alegría del reconocido Marcos Witt, quien completa el cuarto gramófono de su carrera, mientras que Aline Barros obtuvo el mismo reconocimiento a mejor álbum en portugués. Así mismo otro de los cristianos que obtuvo premio fue Bobby Cruz, con su disco Románticos de Ayer Hoy y Siempre.
El hecho de mayor impacto en la noche, estuvo relacionado con las declaraciones entregadas por Juan Luís Guerra al momento de recibir cada una de las estatuillas: El agradecimiento total por la bendición de Dios y a Jesucristo, Señor, Salvador y motivo de inspiración para escribir tan bellas canciones, hizo que creyentes y no creyentes vibraran de emoción con cada una de las apariciones del gran triunfador de la noche.
Es de anotar que el artista dominicano, que hace casi dos décadas comenzó a llevar la música de su nación por diferentes escenarios del mundo, de la mano del exitoso álbum Ojalá Que Llueva Café, fue también elegido como Personaje del Año por la Academia Latina de la Grabación, por la labor que realiza a través de la Fundación Juan Luís Guerra en ayuda de los menos favorecidos.
En la categoría de Mejor Álbum Cristiano en español, el ganador fue Alegría del reconocido Marcos Witt, quien completa el cuarto gramófono de su carrera, mientras que Aline Barros obtuvo el mismo reconocimiento a mejor álbum en portugués. Así mismo otro de los cristianos que obtuvo premio fue Bobby Cruz, con su disco Románticos de Ayer Hoy y Siempre.
El hecho de mayor impacto en la noche, estuvo relacionado con las declaraciones entregadas por Juan Luís Guerra al momento de recibir cada una de las estatuillas: El agradecimiento total por la bendición de Dios y a Jesucristo, Señor, Salvador y motivo de inspiración para escribir tan bellas canciones, hizo que creyentes y no creyentes vibraran de emoción con cada una de las apariciones del gran triunfador de la noche.
El evento se realizó en el Centro de Eventos Mandalay Bay de la Ciudad de Las Vegas, conocida por su vida nocturna y sus casinos, que entre otras cosas, sirvió por primera vez de escenario para el máximo premio de la Academia Latina de la Grabación.
De este modo, las bellas y profundas melodías tropicales del cantautor dominicano Juan Luis Guerra, las filosas rimas y sonidos urbanos de los puertorriqueños de Calle 13 y la pasión de Ricky Martin fueron las principales figuras en la 8va. entrega anual de los premios Grammy Latinos, el galardón más importante de la escena mundial.
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